Lo hizo a mi lado,
susurrando bajo.
Me envolvió en mensajes,
desordenó mi equipaje.
Corrió el viento frío,
y yo sin zapatos,
lo pude alcanzar.
Corrió el viento frío,
y me quiso despertar.
Le guiñé un ojo,
me puse los anteojos,
y con el me fui a pasear.